La peli de... Neus Carbonell

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Com ja saben els habituals de "L'última projecció", La peli de...  és la nostra secció preferida. Aquest és l'espai on els amics del blog trien una peli que els ha marcat profundament i intenten expressar amb paraules als sentiments que van sentir quan la van veure.

Aquest cop ens presenta la seva peli la Neus Carbonell, una bona amiga, apassionada pel món del cinema, que va estudiar a l'ESCAC i que coneix el cinema des de dins, com a professional. Potser per això ha triat aquesta peli tan i tan especial. 

Només un últim avis... hem "tapat" una part del text on s'expliquen detalls de la peli, per protegir d'spoilers la lectura als que no l'hagin vist. Per llegir el text complet, seleccioneu amb el ratolí la part del text que es veu fosca i ja està!

Ara si... us presento la gran peli de la Neus, disfruteu! 



Noemí me pide que participe en esta sección y logra convencerme, así que me pongo a pensar en pelis que hayan sido especiales para mí. La verdad es que al principio me cuesta, porque me vienen a la cabeza secuencias, diálogos, momentos... pero no sé si se merecen el título de “la peli de” hasta que recupero Fanny y Alexander y se hace la luz.


La vi de pequeña, debía tener 9 años y la echaban por la tele. Es una historia que tiene todo: familia, niños, celebraciones, teatro, muerte, miedo, magia... Recuerdo claramente las dos partes, la primera cálida y familiar y la segunda, cuando la madre se casa de nuevo, blanca y cruel. Y recuerdo tener pesadillas con el obispo (tanto me impresionó).

Fanny y Alexander nació como una serie de televisión de 4 capítulos (312 minutos en total) y posteriormente se estrenó en una versión de 180 minutos que cuenta la historia de estos dos hermanos de la gran familia Ekdahl a principios del s. XX. La particularidad de esta familia es la exhuberancia y alegría con la que celebran la vida, a pesar de sus encuentros y desencuentros. Desde una perspectiva infantil, es el lugar ideal para crecer y aprender. Este universo se rompe con la muerte del padre de Fanny y Alexander y con la boda de la madre con el obispo. La madre y los hermanos se mudan a una casa blanca y vacía... con parientes fríos donde todo se vuelve insufrible. El obispo prohibe a la nueva esposa e hijos que sigan en contacto con la familia Ekdahl y estos, cuando la situación se hace insostenible, acuden al rescate. Para ello piden ayuda a un amigo de la familia que rapta a los niños y los lleva a su tienda de antigüedades. Allí conocen a Ismael, el personaje más curioso de la película. Y es difícil continuar sin desvelar el final, así que mejor lo dejo aquí.

Me encanta la luz de la película (como se marcan las diferencias con los colores), el ritmo y la planificación. Pero sobre todo me encanta que después de todas las pelis sesudas de Bergman (algunas estupendas y algunas también de difícil visionado, por decirlo suavemente) decidiera que su última película fuese esta historia (en 1983 Bergman afirmó que Fanny y Alexander cerraba su trayectoria cinematográfica). Porque se pueden contar todas las cosas importantes contando la historia de una gran familia. Todo lo bueno y malo sucede en ese mundo reducido; aunque (afortunadamente) no te reconozcas en todas las historias, sí serás capaz de entender porqué suceden o qué mueve a esos personajes a actuar de esa manera. 

Así que aquí os dejo esta peli escogida y recomendada, espero que la revisitéis si ya la habéis visto o que os animéis a disfrutarla si no la conocéis, :)

2 comentaris :

Marc Ambit ha dit...

Me encanta... simplemente me encanta esta "Peli de..." de Neus. Me encanta cuando nuestros lectores nos cuentan intimidades, cuando nos hablan de recuerdos más que de la película y nos hacen venir ganas de ver la peli, por primera vez o por enésima vez. Me encanta.
Muchas gracias, Neus.

Marc Ambit ha dit...

Ah, por cierto, Neus. El dia en que tú viste esta peli por la tele como cuentas, yo también la estaba viendo en mi habitación. Mi abuela, por su parte, también la estaba viendo, en el comedor, y ninguno de los dos lo sabía. Así que al final de la peli, cuando nos encontramos para darnos las buenas noches, descubrimos que habíamos estado viendo la misma peli los dos. Y recuerdo como si fuera ayer que me encantó descubrir que a los dos nos había encantado, que nos había hechizado por igual.
Película mágica donde las haya, que despierta coses preciosas en quien la ve.

Por cierto, habéis visto la versión para televisión? Si alguien la quiere, nosotr@s la tenemos.